miércoles, 2 de mayo de 2012

PRECISANDO CONCEPTOS


MELQUISEDEC

I

Tiempos muy remotos que rebasan la imaginación de los más celebres fantaseadores en cuanto a tiempos se refiere, no podrían siquiera acercarse un poco a los tiempos y eternidades que pesan sobre los hombros de quien en la actualidad, por ligeras referencias es nombrado como Melquisedec. Melquisedec, "...Sacerdote del Dios altísimo..." según las expresiones bíblicas, constituye uno de los personajes más misteriosos que jamás se haya conocido, no sólo por su escasa referencia, sino por que, quienes han logrado a través de las purificaciones, el conocimiento y la verdadera meditación, llegar a conocer lo que realmente es Melquisedec, no pueden transcribir en ningún lenguaje humano, toda esa magnificencia y esplendor que rodean a Melquisedec. Melquisedec, sin embargo, pese a lo inconceptuable de su Ser, no ha permanecido más allá de lo sublimemente abstracto, sino que dejando su excelsa divinidad, renunciando su inconmensurable poder, ha logrado llegar a manifestarse no sólo en esta pequeña partícula cósmica conocida como Planeta Tierra, sino en múltiples soles, estrellas, planetas, etc. del desconocido universo. Melquisedec constituye uno de los más grandes pilares en los que se sustentan los universos, pues ES en sí mismo una inconceptuable parte de eso que las religiones denominan como DIOS. Eso que es DIOS, ES en Melquisedec, y EL, Melquisedec, ES en DIOS. MELQUISEDEC ES EN DIOS. Dogmáticamente se afirma que Dios está en todas partes, y es obvio, se cree que Dios está en todos los seres llamados humanos y hay quienes sostienen que también se halla en los seres que no son humanos, vale decir en las criaturas de la naturaleza, en toda yerba y en cada piedra... No vamos a discutir este aspecto, pero sí vamos a plantear la clara diferencia de que todo lo creado en el universo puede ser morada de eso que se llama Dios, que Dios puede estar en absolutamente todo aquello que es su creación, bien; pero, Melquisedec ES en DIOS. No todo lo creado ES en Dios, ni todos los que se consideran hijos de Dios, son en DIOS. MELQUISEDEC ES UNO EN DIOS.
MELQUISEDEC, "Sacerdote del Dios altísimo" ejerce su sacerdocio divinal siendo uno en el DIOS ALTISIMO, y eso que es DIOS, ES en MELQUISEDEC, DIOS ES EN MELQUISEDEC. Dios se expresa en Melquisedec, pues él, Melquisedec es la expresión viva del Dios Vivo. Decimos claramente: "expresión viva", y de ninguna manera podríamos referirnos a algún ser aparentemente humano, por que tras esa apariencia se esconde simplemente un espécimen extraño de los muertos en vida, de muertos vivientes que jamás podrían ser expresiones vivas de la divinidad. La expresión viva de la Divinidad no tiene limitación alguna, salvo la voluntad del individuo. Melquisedec no tiene límite alguno para su expresión a través de lo inconmensurable de los cosmos, así como su poder es tan grande que de por sí, resulta ser tan ilimitado como los universos que sustenta, sin embargo, su grandeza no disminuye por el hecho de constituirse en expresión viva de su verbo en uno u otro cuerpo celeste, o en uno u otro punto de la geografía de cualquier país. Su poder es integral, microcósmico, macrocósmico y supracósmico. Con esto queremos decir que su Divinidad, Majestuosidad y Poder, no sólo abarca las esferas más allá de la concepción humana, sino inclusive llega a los estratos más minúsculos e insignificantes de la naturaleza; y es obvio, llega naturalmente a beneficiar con luz, vida, libertad, amor y sabiduría a todos los seres humanos que de alguna manera logran establecer un nexo de comunión con eso que desconocen, con la Divinidad.
Melquisedec no constituye una vaporosa entidad abstracta, ni un concepto vago de misticismo, sino, una realidad cósmica innegable que se manifiesta allí donde hay un corazón que sufre la sed de justicia y el hambre de amor. Melquisedec, siendo tan inconceptuablemente grande, es y está sin embargo, allí donde el dolor lacera no sólo los cuerpos sino el alma, y brinda sin restricción alguna su luz y fuego divinos, para eliminar todo vestigio de sufrimiento en los seres que sufren, sin importar su fe religiosa o creencia, su grado de instrucción académica o ignorancia, su noble cuna o miseria. Es el agua que brota de la roca viva en el desierto de la ignorancia, y es el maná que dimana de los aires en la montaña del sufrimiento.
Si una profunda pena agobia la vida, si una enfermedad postra la salud en el lecho de hospital, si la miseria aflige al corazón humano, si la adversidad es el pan cotidiano para un humilde hogar, si el dolor corona las sienes de cualquier ser humano y no hay quien remedie o elimine los males; que el sufrimiento no cubra con su espesa niebla vuestros ojos y vuestra alma, que para la solución de todos vuestros problemas está ahí cerca, junto a vosotros... ¡Sí...! ¡Ahí y allá, y aquí, es y está EL..! ¡MELQUISEDEC..! ¡Abrid vuestros ojos, inflamad vuestro corazón, que EL, ES Y ESTA, siempre aquí y allí, como la vida, como la luz, como el infinito!

II

La VIDA no ha tenido un principio ni tendrá un fin. Es tan abstracta, tan sublime, tan real, como lo es la misma divinidad, como lo es DIOS. LA VIDA proviene de eso que es DIOS. DIOS ES LA MISMA VIDA. Lo que anima al inconmensurable universo es su VIDA, la vida que DIOS dimana de sí, la vida de Dios es lo que da realmente vida al infinito universo. Sí Dios, dejaría de ser, absolutamente toda la vida existente en los cielos, y más allá de los cielos, y también aquí en la tierra, bajo de la tierra, y también allí en lo que las religiones llaman infierno, dejaría de existir, y todo sería NADA. ¿Quién podría siquiera conceptuar la "NADA"? La nada no existe, sólo vive el TODO. El TODO es vida. La VIDA es TODO. El TODO es DIOS y DIOS ES EN TODO. MELQUISEDEC ES EN DIOS. DIOS ES EN MELQUISEDEC. MELQUISEDEC ES EN TODO Y ES TODO. Sólo quien ES en todo, no depende en su GRANDE VIDA de nada ni de nadie, es un "Rey de Justicia y Rey de paz; sin padre y sin madre, sin genealogía que ni tiene principio de días ni fin de vida.." MELQUISEDEC el grande Rey de Justicia y de Paz, ES en el insondable vacío de los cosmos. ES en nuestra galaxia y ES en nuestro sistema solar; así como que ES el REY de JUSTICIA Y PAZ quien tiene su trono ígneo en el Templo Corazón de nuestro planeta. JUSTICIA Y PAZ es lo que tanto precisa nuestra doliente humanidad, y MELQUISEDEC ES el Rey de Justicia y paz. Es a MELQUISEDEC a quien necesitan los amantes de la vida, los sedientes de fuego y los hambrientos de luz. Es a MELQUISEDEC a quien necesitan los que sufren injusticia, miserias, hambre, dolor y penas. Es a Melquisedec a quien necesitan los hombres y pueblos que sufren las cruentas guerras y sus dolorosas consecuencias, es a Melquisedec a quien necesitan los amantes de La Paz y la Vida... Y MELQUISEDEC ES aquí, allí, y más allá de los límites de los universos. EL ES PRESENTE aquí y allá donde un dolorido corazón lo necesite y una voz angustiada lo llame. EL ES el SUPREMO SACERDOTE DEL DIOS ALTISIMO que puede brindarlo todo, sin pedir nada a cambio... EL puede darlo TODO, ABSOLUTAMENTE TODO, sin condición alguna, sin pactos ni convenios, sin reclamar el corazón ni el amor incondicional de sus favorecidos, sin exigir sumisión ni fe alguna, sólo el cumplimiento de la Gran Ley Universal que se traduce en la siguiente máxima de su mandato entregado hace millones de siglos: AMAD A VUESTRO HERMANO MÁS QUE A VOS MISMO.

1 comentario:

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